Diálogos sobre ganadería y adopción de tecnologías
Paulo Recavarren (Ing Agr de la Agencia de Extensión del INTA Balcarce en Olavarría) disertó sobre la incorporación de tecnología en la ganadería argentina. En provincia de Buenos Aires, el promedio de índice de conversión de los últimos 15 años es de 40 kg ms/kg de carne producido. Los productores más eficientes de la zona han alcanzado conversiones de 27 kg ms/ kg de carne sistemas de cría y 20 kg ms/kg de carne en recria-engorde. Podemos ver entonces que estas conversiones son ineficientes pero mejorables.
Mientras nosotros discutimos como aumentar el 60% de destete promedio nacional, en el mundo se están viendo cambios culturales, veganismo, cuestionamiento a la actividad por generación de gases de efecto invernadero, “carne de laboratorio”, aparición de leyes de bienestar, discusión sobre la de propiedad de los animales con antecedentes de leyes y fallos (ver caso de “Sandra la orangutana”).
“En esa discusión se nos está yendo la vida” remarco Paulo. En una edición de la Revista Chacra de 1963, Carlos Saubidet (quien era Secretario de Agric. y Gan.) plantea en el discurso de apertura de Palermo los desafíos para la ganadería, y son lo mismo que nos planteamos ahora.
Durante la disertación Paulo muestra los resultados de una encuesta realizada a 250 productores y desglosa las limitantes en la adopción de tecnología por parte de nuestros sistemas ganaderos.
Nos quedamos con la reflexión que dejó al final de la charla: ”Los productores ganaderos tienen la necesidad real y sentida -pero de verdad- real y sentida de aumentar la producción, fundamentalmente en cría? O como están, están bien, tranquilos y así les alcanza? Esa pregunta me la hago hace mucho tiempo, y la verdad es que esto pareciera más ser una preocupación del estado, de los organismos del estado, de los gobiernos, de los organismos de ciencia y tecnología, de las educativas como las universidades, las escuelas agropecuarias, de las instituciones, de los profesionales, que de los mismísimos productores. Y la verdad que lo que no puedo dilucidar es si esto que pasa está bueno o no. (..) Yo pienso que para un productor por ahí esta bueno, pero…para el país?”
“Otra cosa que quiero compartir es una sensación personal, me parece que el problema de la no adopción o la muy baja adopción de tecnología en los sistemas ganaderos no es un problema ni productivo, no es un problema económico tampoco. Mucho menos de oferta tecnológica y como vimos, tampoco lo es ambiental. Estoy convencido, o casi, que es un problema de personas. De relaciones entre personas, y de las decisiones que toman todas esas personas que están en el día a día en las empresas ganaderas”.